miércoles, 8 de julio de 2009


















En este lugar de ensueño,
cuantas veces repito yo.
Donde se besan el cielo y el río,
y entre los árboles escondido,
el horno de Callejón.

Esta vista de maravilla,
recorre de orilla a orilla,
donde el duende descansó.
Y en las riberas de Andalucía,
no hay ribera como la mía,
donde el sultán se bañó.

Manuel Franco

















Allá por el fondo del Bajo,
el camino se bifurca.
Por uno un coche quemado,
por el otro se ve una mula,
que parece, que nos está mirando.

Los álamos se ven desnudos,
y hay, algunos verdeando.
Y se contemplan las nubes,
mexcla de azul y blanco.
Sobre el suelo, se ven unos tubos,
de los que antaño regaron.

Próximo donde está la mula,
un lomo de pencas,
de higos, chumbos blancos,
que los cogen con una rueca,
o con una tenaza de mano.

Manuel Franco